El equipo vasco de ciclocross Grupo Hirumet Taldea ha puesto fin a la temporada
a su regreso del mundial de Louisville donde el sub 23 vizcaíno Jonathan Lastra
finalizó en una excelente decimoquinta posición. Ha sido un año de luces y
sombras. Las mayoría de las sombras las ha protagonizado el líder Egoitz
Murgoitio al que un sinfín de averías y pinchazos no le han dejado brillar en la
Copa del Mundo donde un meritorio decimoquinto lugar en Plzen ha sido su mejor
resultado.
Lo peor vendría en la fuerte caída previa al Campeonato de
Euskadi, que le hizo llegar mermado al título nacional donde a pesar de todo
logró terminar segundo. Sin embargo la rodilla dijo basta y tuvo que adelantar
su final de temporada antes de disputar el mundial para el que estaba inscrito.
Con todo Murgoitio ha firmado cuatro victorias y cinco segundos puestos que hay
que dar por buenos a la vista de tanto infortunio. Recuperar la rodilla y volver
con fuerzas renovadas la próxima campaña son los objetivos del hombre de
Hirumet.
Bordando la perfección en cuanto a resultados la mayoría de las
luces que han hecho brillar a Grupo Hirumet Taldea han corrido a cargo del
talentoso sub 23 Jonathan Lastra: trece victorias, incluyendo los títulos de
Bizkaia, Euskadi, España y el Superprestigio nacional, así como varios podios en
pruebas Open con élites y la guinda de su actuación en Estados Unidos donde
terminó el Mundial entre los quince mejores. Seguir progresando es todo lo que
se plantea el joven vizcaíno de la mano de su escuadra.
Tiempo para el
balance y sobre todo para el agradecimiento: al patrocinador Hirumet que hace un
tremendo esfuerzo por hacer posible este sueño internacional, a Orbea por su
aportación material y la constante evolución del mismo, a Ciclos Iturriaga que
hace que ese material esté siempre a punto, Carletti Sportivo con sus prendas de
excelente calidad y que son imprescindibles en una disciplina tan dura como el
ciclocross. Al cuerpo técnico encabezado por Jon Cengotitabengoa y bien ayudado
siempre por Jose Ramón Murgoitio y Eneko Iturriaga. A Ana Rekalde, que se ocupa
del ingrato departamento administrativo y por supuesto a toda esa gente anónima
que con su aliento y apoyo ha conseguido que nuestros corredores den el máximo
en cada carrera. A todos gracias, eskerrik asko y ya falta menos para volver a
encontrarnos
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